Teología reformada
El pueblo presbiteriano pertenece a círculos cada vez más amplios de identidad y relación teológicas: Reformado, protestante y cristiano. Ser presbiteriano es una forma de ser reformado, que es una forma de ser protestante, que a su vez es una forma de ser cristiano.
La Iglesia Presbiteriana (EE. UU.) afirma las creencias distintivas de la Tradición Reformada, que se remontan a los principios articulados por Juan Calvino en el siglo XVI. Un elemento central de la tradición reformada es la afirmación de la soberanía de Dios. Esa seguridad proporciona una base para otros rasgos del camino reformado: que Dios nos llama al servicio en el mundo, que nuestra vida en común debe ordenarse de manera que permita florecer a todas las personas miembro, que Dios nos llama a una mayordomía generosa de lo que tenemos, y que debemos permanecer alerta ante la tendencia humana a la idolatría y la tiranía y responder al llamado de Dios a trabajar por una sociedad que busque la justicia.
Nuestra salvación a través de Jesús es un generoso regalo de Dios para nosotros y no el resultado de nuestros propios logros. Es tarea de todas las personas, tanto ministras como laicas, compartir esta Buena Noticia con el mundo entero. Esa es una de las razones por las que la IP (EE. UU.) está gobernada a todos los niveles por una combinación de clero y laicado que incluye a mujeres, hombres y personas no binarias.
La IP (EE. UU.) confiesa sus creencias en declaraciones de fe procedentes de toda la historia de la iglesia. Doce declaraciones de fe se recogen en la primera parte de la constitución de la denominación, llamada Libro de Confesiones. Según la segunda parte de la constitución, el Libro de Orden, en las declaraciones confesionales la IP (EE. UU.) "declara a sus personas miembro y al mundo quién y qué es, en qué cree y qué se propone hacer".
The Presbyterian Church (U.S.A.) affirms the distinctive beliefs of the Reformed Tradition, which date back to principles articulated by John Calvin in the 16th century. Central to the Reformed tradition is affirmation of the sovereignty of God. That assurance provides a basis for other traits of the Reformed way: that God calls us to service in the world, that our life together is to be ordered in ways that enable all members to flourish, that God calls us to generous stewardship of what we have, and that we are to stay alert to the human tendency to idolatry and tyranny and respond to God’s call to work for a society that seeks justice.
Our salvation through Jesus is God’s generous gift to us and not the result of our own accomplishments. It is everyone’s job — ministers and laypeople alike — to share this Good News with the whole world. That is one reason the PC(USA) is governed at all levels by a combination of clergy and laity that includes women, men, and nonbinary people.
The PC(USA) confesses its beliefs in statements of faith from across the history of the church. Twelve statements of faith are gathered together in the first part of the denomination’s constitution, called the Book of Confessions. According to the second part of the constitution, the Book of Order, in the confessional statements the PC(USA) “declares to its members and to the world who and what it is, what it believes, and what it resolves to do.”