Hambre
Hambre
Casi 282 millones de personas de 59 países y territorios padecerán hambre aguda en el 2023, según UNICEF. En Estados Unidos, más de 44 millones de personas sufrieron inseguridad alimentaria en el 2022, entre ellas 1 de cada 5 niñez, según Feeding America.
La Iglesia Presbiteriana (EE. UU.) no lucha sola contra el hambre y la pobreza. Trabajamos con aliados en nuestro país y en el extranjero, que son una parte crucial de esta misión. Juntos, nos esforzamos por aliviar el hambre y eliminar sus causas profundas, haciéndonos eco del llamado de Jesús a alimentar a las personas con hambre.
La IP (EE. UU. ) también trabaja para abordar las causas profundas del hambre. La pobreza es una de las principales causas, junto con otras fuerzas económicas que mantienen a las personas desnutridas y empobrecidas. Los conflictos políticos, las sequías, los incendios y las inundaciones relacionados con el cambio climático también contribuyen a la inseguridad alimentaria.
Durante 55 años, el Programa Presbiteriano contra el Hambre se ha dedicado a acciones que alivian el hambre, incluyendo la ayuda alimentaria directa, el desarrollo sostenible, la defensa de los derechos y la educación. Al aliarse con congregaciones, concilios intermedios y aliados globales, el Programa contra el Hambre aumenta el impacto y la eficacia colectivos de la iglesia.
