People participating in the The CommUNITY Collective, #StopAsian event, standing in solidarity against hate crimes, in Columbus, OH on March 20, 2021. Photo by Paul Becker licensed under CC BY 2.0)

Los participantes en el evento La ComUNIDAD Colectiva, #StopAsian, demuestran su solidaridad contra los delitos de odio en Columbus OH el 20 de marzo de 2021. Foto de Paul Becker con (licencia bajo CC BY 2.0)

[ English ] [ Português ] [ 한국어 ] [ Tiếng Việt ] [ 中文 ]

Queridos hermanas y hermanos en Cristo,

Este es un mensaje para todos y es un mensaje en particular para todos aquellos/as que son asiáticos o de ascendencia asiática.

La Iglesia Presbiteriana (Estados Unidos) se solidariza con nuestros hermanos/as asiáticos y se opone al odio antiasiático.

En medio del creciente número de crímenes de odio y tras la muerte por disparos de ocho personas en Atlanta, seis de las cuales eran mujeres de ascendencia asiática, sólo podemos imaginar el dolor, el llanto, el miedo y la mezcla de sentimientos que muchas de las comunidades asiáticas están indudablemente sintiendo. Lloramos la pérdida de ocho vidas a causa de la violencia. Oramos por las familias y las comunidades afectadas por la pérdida. Lamentamos la división y el odio que siguen alentando palabras y actos de chivo expiatorio y violencia hacia nuestros hermanos/as asiáticos. También lamentamos el daño causado a quienes se encuentran entre los más vulnerables de la sociedad por la incapacidad de ver la personalidad plena de otros/as.

A nuestros hermanos/as asiáticos, les vemos entre nosotros, nuestros espíritus y nuestras oraciones están con ustedes. Nuestra expresión del Cuerpo de Cristo se enriquece con su presencia.

Así como la IP (EE. UU.) está en contra de cualquier otra forma de odio y representa el amor y la justicia de Dios mostrada por Jesucristo, también nos oponemos al odio hacia aquellos/as de ascendencia asiática. Es antitético a la visión de la comunidad amada de Dios. Es antitético a los fundamentos de diversidad e inclusión de la IP (EE. UU.), en los que todos los hijos/as de Dios son amados y bienvenidos a pertenecer a Dios y a los demás.

Este sentimiento antiasiático, aunque ha estado en aumento en el último año, no es nuevo.[1] Por lo tanto, se insta a todos los/as presbiterianos a no cansarse ni desmayar en contra del odio y la violencia; y a mantenerse en pie por el amor y la justicia de Cristo.

ORACIÓN:

Dios de gracia y misericordia,

Escucha nuestras oraciones por la protección de los hermanos/as asiáticos entre nosotros. Consuela a los que están sufriendo. Fortalece a los que tienen miedo. Guía a los que están perdidos. Anima a aquellos que están abrumados. Tú has sido nuestra esperanza en épocas pasadas. Y sigues siendo nuestra esperanza. Transfórmanos para que podamos seguir trabajando hacia la visión de tu reino que Cristo Jesús vino a mostrarnos. En el nombre de Cristo. Amén.



[1] De acuerdo con la organización sin fines de lucro Stop AAPI Hate, entre 2019 y 2020, hubo un aumento del 150% en los crímenes de odio contra asiáticos, asiático-americanos e isleños del Pacífico.