Si consultáramos con una herramienta de Inteligencia Artificial sobre la pregunta «¿Cuál es la actividad de Dios en el mundo?», respondería reconociendo la complejidad del tema y sugiriendo enfoques desde las perspectivas bíblicas, teológicas y experienciales. En última instancia, la IA concluiría que la actividad de Dios en el mundo sigue siendo un misterio que trasciende la comprensión humana.
Sin embargo, es crucial prestar atención a la actividad de Dios en el mundo cuando se sirve a las demás personas. Dios nos llama a hacer lo que Dios está haciendo. Por lo tanto, es vital que las personas que son ordenadas como ancianas gobernantes y las iglesias que dirigen comprendan el carácter y la actividad de Dios y luego disciernan la voluntad de Dios para el mundo.
La 197ª Asamblea General de la Iglesia Presbiteriana (EE. UU.) adoptó una Declaración de fe. La sección titulada «Dios se da a conocer en Jesucristo» puede ayudarnos a comprender la acción de Dios a través de su hijo:
«La intervención de Jesús en la condición humana es la intervención de Dios. Su compasión por todo tipo de personas es la compasión de Dios. Su demanda de que haya justicia, verdad y fidelidad es la demanda de Dios. Su disposición a sufrir el rechazo es la disposición de Dios. El amor de Jesús por las mismas personas que lo rechazan es el amor de Dios».
Si entendemos que el Jesús bíblico es verdaderamente humano, entonces podemos servir viendo el rostro de Jesús en las otras personas y sabiendo que toda persona merece el amor de Dios. Si entendemos que la compasión de Jesús por la gente que está enferma, y que es rechazada y oprimida es la compasión de Dios, entonces podemos actuar con la misma empatía hacia las personas que son rechazadas por la sociedad y sometidas a su violencia. Si vemos las acciones de Jesús hacia las mujeres, la niñez, su religión y el imperio que colonizó a su pueblo como demandas de justicia, entonces podemos comprender el reino de Dios, su deseo para su familia, y trabajar para lograrlo. Si leemos la Biblia y vemos las acciones de Jesús como contraculturales, entonces podemos entender que algunas de nuestras acciones de servicio en nombre de Dios no podrían ser entendidas por otras personas.
Es fundamental que las personas ordenadas como ancianas gobernantes piensen en el mensaje que su iglesia está proclamando. ¿Qué aspectos de Dios se están predicando, no sólo los domingos por la mañana, sino a través de todo lo que hace la iglesia para servir e impactar las vidas de quienes la rodean? Si su servicio a las demás personas no refleja todos los aspectos de la vida de Jesús, no sólo sanar sino restaurar a las personas a la totalidad de sus vidas o servirles mientras se denuncian los sistemas que las mantienen enfermas, rechazadas o aisladas, entonces falta algo en nuestra manera de entender la actividad de Dios en el mundo.
Russell Moore, editor en jefe de Christianity Today, compartió en una entrevista que algunos pastores se han acercado a él y le han expresado su experiencia al dar sermones sobre «volverle la otra mejilla» (Mateo 5,38-40). Para su sorpresa, algunas personas que son parte de sus congregaciones rechazaron la idea, considerándola ineficaz y débil. Esta respuesta se produjo a pesar de que los pastores les dijeron que estaban citando las palabras de Jesús.
¿Estamos realmente comprendiendo quién era Jesús? ¿Estamos entendiendo la actividad de Dios en el mundo? ¿Estamos comprendiendo la manera en que Dios, a través de Jesucristo, se manifestó en el mundo? ¿Estamos participando activamente en un discipulado encarnado que sigue la vida de Jesús a través de nuestras acciones y palabras, o estamos promoviendo, sin darnos cuenta, un discipulado que defiende valores alternativos, con el potencial de malinterpretar la actividad de Dios en el mundo?
Las personas que son ordenadas como ancianas gobernantes tienen la responsabilidad de brindar oportunidades tanto a las personas interesadas en unirse a la iglesia como a las que ya forman parte de ella, que les animen a analizar y profundizar su fe al comprender la actividad de Dios en el mundo. A través de la participación y la reflexión en la adoración, el discipulado y el servicio, las personas que son parte de la congregación tienen la oportunidad de ser activamente las manos y los pies de Dios en el mundo.
Para reflexionar:
- ¿Qué puede hacer, como anciana o anciano gobernante, para discernir y evaluar lo que piensa sobre la actividad de Dios en el mundo?
- ¿Cómo demuestra su iglesia el amor de Dios, no sólo los domingos por la mañana, sino a través de todo lo que hace para servir y ser de impacto a las vidas de quienes la rodean?
- ¿Qué oportunidades puede brindar para tener conversaciones sobre la actividad de Dios en el mundo por medio de Jesucristo y cómo su vida y acciones impactan la manera en que servimos?
Marissa Galván-Valle es ministra de la Palabra y los Sacramentos en la Iglesia Presbiteriana (EE.UU.). Es la editora principal de recursos en español en el Presbyterian Publishing Corporation y pastora a tiempo parcial de la Iglesia Presbiteriana Beechmont, una iglesia intercultural que celebra su culto de todos los domingos en español e inglés. Fue ordenada anciana gobernante cuando tenía 21 años.
A lo largo del 2023 y 2024, los artículos mensuales de Regarding Ruling Elders alternarán entre una inmersión profunda en las formas en que las personas ordenadas como ancianas gobernantes disciernen y miden la vida de una congregación a través del ministerio de las membresías e historias sobre cómo están usando su llamado y dones mientras se mueven dentro y fuera de las paredes de la congregación.
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