Un reportero de Cuba entrevista al Rvdo. José Manuel Capella Pratts, enlace regional de Misión Mundial para el Caribe. (Foto aportada)

Un reportero de Cuba entrevista al Rvdo. José Manuel Capella Pratts, enlace regional de Misión Mundial para el Caribe. Foto aportada.

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Junto con un grupo de aliados ecuménicos, una delegación de asociados de la IP (EE. UU.) se reunió con una delegación cubana en la Semana de Alto Nivel de la 78ª Asamblea General de las Naciones Unidas para tratar temas como las sanciones económicas, el cambio climático y cómo profundizar la colaboración entre la IP (EE. UU.) y su iglesia hermana la Iglesia Presbiteriana - Reformada en Cuba - la Iglesia Presbiteriana Reformada en Cuba (IPRC). La delegación cubana estaba compuesta por el Presidente Miguel Díaz-Canel, el ministro de Asuntos Exteriores y los embajadores cubanos en Estados Unidos y la ONU.

El debate de la mesa redonda formaba parte de una consulta anual con la misión cubana que se celebra coincidiendo con la reunión de la Asamblea General de la ONU. El Presidente Díaz-Canel pronunció unas palabras de apertura en las que abordó las dificultades a las que se enfrentan los cubanos como consecuencia del prolongado bloqueo, que ha complicado la entrega de ayuda humanitaria desde el 2019, cuando Estados Unidos incluyó a Cuba en la Lista de Estados Patrocinadores del Terrorismo. Pidió reformar los sistemas de financiación y aumentar el apoyo al desarrollo sostenible y la acción por el clima. Díaz-Canel también acogió con satisfacción los intercambios entre las iglesias de Estados Unidos y Cuba y expresó su gratitud por las asociaciones y comunidades religiosas en la isla, así como por las contribuciones de la Iglesia en la asistencia a las familias vulnerables en Cuba.

Entre los asistentes de la IP (EE. UU.) se encontraban los enlaces regionales de Misión Mundial para el Caribe, Vilmarie Cintrón-Olivieri y el Rvdo. José Manuel Capella-Pratts, la coordinadora del área de América Latina y el Caribe, Tracey King-Ortega, y Sue Rheem, directora y representante ante las Naciones Unidas del Ministerio Presbiteriano en las Naciones Unidas (PMUN por sus siglas en inglés). A ellos se unieron aliados ecuménicos en representación del Concilio Nacional de Iglesias, la Iglesia Unida de Cristo, la Iglesia de los Hermanos, la Iglesia Episcopal, la Iglesia Metodista Unida, el Concilio Mundial de Iglesias, Caritas Internationalis, Ayuda Católica y ACT Alianza.

A pesar de las significativas diferencias políticas e ideológicas entre Estados Unidos y Cuba, los asistentes de IP (EE. UU.) consideraron que la oportunidad de aprender y escuchar a la delegación cubana era tremendamente valiosa para alimentar las relaciones en la región. Cintrón-Olivieri señaló que el contexto de la reunión era mucho más que escuchar lo que el presidente cubano tenía que decir, sino ver y aprender de otros miembros de la comunidad religiosa que realizan una labor similar.

Vilmarie Cintrón Olivieri, enlace regional de Misión Mundial para el Caribe, afirmó que las reuniones brindaron la oportunidad de

Vilmarie Cintrón Olivieri, enlace regional de Misión Mundial para el Caribe, afirmó que las reuniones brindaron la oportunidad de "escuchar, aprender y conectar". Foto aportada.

"Como enlaces regionales escuchamos y cultivamos las relaciones, interpretando el contexto y la situación de los lugares de la región a los socios eclesiásticos, así como a las congregaciones de Estados Unidos", afirmó Cintrón-Olivieri. "Esta reunión ha brindado una importante oportunidad para hacer precisamente eso: escuchar, aprender y conectar. En primer lugar, con la extraordinaria labor de educación y defensa que Sue Rheem y su equipo están llevando a cabo en la PMUN, y para entablar relaciones con los asistentes a la reunión. Elevamos la importancia de la relación en asociación y mutualidad con el IPRC y el ministerio que encarnan en sus comunidades. Escuchar y aprender son los cimientos de cualquier relación, y las relaciones son el núcleo de un cambio positivo y duradero. Esperamos que esta reunión haya sido una ocasión así para todas las personas presentes".

"Somos conscientes de las tremendas diferencias políticas e ideológicas entre nuestras naciones, pero eso no debe ser un obstáculo que detenga a nuestra iglesia en sus esfuerzos por caminar junto al pueblo de Cuba, en particular apoyando el testimonio y la misión de nuestra iglesia hermana, la IPRC", dijo Capella-Pratts.

La asociación entre IP (EE.UU.) y el IPRC se remonta a 1890. Apuntalar la colaboración en curso con los aliados cubanos es el mandato de la 222ª Asamblea General (2016) del informe de la IP (EE. UU.), "Nuevas esperanzas y realidades en las relaciones cubanoamericanas: Un 'Nuevo Momento'".

El informe aboga por una "relación mejor y más justa" que la que Estados Unidos y Cuba han compartido antes y desde la revolución de 1959 y apoya la autodeterminación y la iniciativa del pueblo cubano. Entre las principales recomendaciones del informe figuran las siguientes:

  • Celebrar la vida del IPRC y mantener una asociación fructífera
  • Apoyar la posición jurídica del IPRC como iglesia cristiana
  • Honrar los logros sociales y los valores democráticos de Cuba, fomentando al mismo tiempo las libertades civiles plenas.
  • Apoyar la normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba.

"Fue un privilegio acompañar a nuestra delegación de IP (EE. UU.) a reunirse con el presidente cubano para compartir las experiencias vividas por nuestros socios eclesiásticos que sirven a sus comunidades y por la oportunidad de dialogar con un jefe de Estado en pro de un mayor entendimiento, paz y reconciliación entre nuestros dos pueblos", dijo Rheem.

"El presidente abordó las dificultades a las que se enfrenta el pueblo cubano a causa de décadas de bloqueo. Sin embargo, también destacó los avances de Cuba en materia de igualdad de género, ciencia y tecnología, educación, iniciativas para los jóvenes y lucha contra el racismo. Acogió con satisfacción los intercambios entre las iglesias de EE.UU. y Cuba y expresó su agradecimiento por las contribuciones de la iglesia para ayudar a las familias vulnerables en Cuba."

King-Ortega señaló que el presidente era muy consciente del papel que desempeñan las iglesias de la comunidad para colmar las lagunas existentes, y que reuniones como ésta ayudan a amplificar "la fe en acción".

"Se habló de los obstáculos financieros existentes a causa del embargo, así que en fiel asociación con el IPRC queremos compartir recursos con la iglesia para que puedan llevar a cabo sus proyectos comunitarios y servir mejor a la comunidad. No es tan sencillo como enviarles dinero", dijo King-Ortega.

A la luz de una política exterior que no parece que vaya a cambiar pronto, ¿hacia dónde se dirige la comunidad ecuménica en su relación con Cuba?

"Seguiremos caminando junto al pueblo de Cuba, apoyando su testimonio y a nuestra iglesia hermana, que es de lo que trata el mandato de Nuevo Momento", dijo Capella Pratts. "Me parece muy significativo que nuestra visita a la Misión de Cuba en Nueva York haya tenido lugar en el contexto del Día Internacional de la Paz, el 21 de septiembre, que es una fecha (y cito aquí del sitio web de la ONU) 'para que toda la humanidad se comprometa con la Paz por encima de todas las diferencias y contribuya a construir una Cultura de Paz'".

Actualmente se encuentra itinerando por Estados Unidos como parte del Programa Internacional de Hacedores de Paz el Rvdo. Alison Infante Zamora, moderador del Sínodo del IPRC y miembro del Presbiterio de Matanzas. Está compartiendo su experiencia vivida a través de relatos sobre las realidades de Cuba con congregaciones de Luisiana, Florida, Nuevo México y Michigan.

La Red de Aliados de Cuba celebrará su reunión anual del 24 al 27 de octubre en Maryland.