Antes de escuchar un informe de factibilidad de captación de fondos en Stony Point Center el viernes y luego de conocer el plan de la rda. Dra. Diane Moffett para ampliar cualquier esfuerzo de captación de fondos para implementarlos en toda la iglesia, la Agencia Presbiteriana de Misión se ocupó de los informes del comité.
La mayoría de los puntos de acción que vinieron de los cinco comités que informaron a la junta, que se reunieron virtualmente en una sesión plenaria el viernes por la mañana, fue aprobada sin cambios. La junta, sin embargo, eliminó la siguiente redacción de un puñado de comentarios sobre los temas de negocios propuestos para la Asamblea General: “En este tiempo de recursos financieros limitados, instamos a todos los comisionados(as) a considerar cuidadosamente cada recomendación que tenga implicaciones financieras que requieran el gasto de fondos adicionales. ¿Es posible que otro comité existente pueda hacerse cargo de esta responsabilidad?"
Uno de esos comentarios eliminados provino de la junta del Comité de Coordinación, que comentaba sobre una propuesta de crear un Comité de Defensa para el Grupo de Trabajo para la Abogacía del LGBTQIA+.
"Esa última cuestión me hace dudar," dijo la rda. Floretta Barbee Watkins, miembro de la junta. Los comités existentes ya tienen tareas "vastas", ella dijo. "Me pregunto si plantear esa cuestión hace daño".
Por votación en voz alta, la junta aprobó un presupuesto de base unificado para el 2021 (aproximadamente $90.5 millones) y 2022 (aproximadamente $92.6 millones). Debido a la pandemia del coronavirus, los proyectos de presupuesto de ambos años, así como el presupuesto de 2020, son susceptibles a ser cambiados durante las próximas semanas antes de pasar a la 224ª Asamblea General para su aprobación por los comisionados(as).
Por recomendación del Comité de los Consejos Intermedios y después de la lectura de una carta de uno de sus miembros, Judy Wellington, la junta votó por comunicarse con el Sínodo del Suroeste y los cuatro presbiterios dentro del sínodo — de Cristo, Gran Cañón, Santa Fe y Sierra Blanca — así como el personal nacional sobre el ajuste de las ganancias de la venta de la propiedad de Santa Fe, anteriormente parte del Centro de Retiros y de Enseñanza Ghost Ranch en Abiquiu, Nuevo México. En su carta, Wellington solicitó que una parte de las ganancias se destinara al acceso al internet para las comunidades navajo en la región.
Al inicio de su reunión, la junta escuchó a las co-moderadoras de la 223º Asamblea General, la anciana gobernante Vilmarie Cintrón-Olivieri y la rda. Cindy Kohlmann.
"Esta podría ser la última vez que Cindy y yo estemos con ustedes un poco antes de que finalice nuestro mandato," dijo Cintrón-Olivieri. “Queríamos hacerles saber que estamos orando por ustedes y la iglesia durante estos tiempos difíciles. Los alentamos a discernir lo que Dios les está llamando a hacer.”
"Gracias por intervenir con fe," dijo Kohlmann. “Todavía no sabemos cómo será esta Asamblea General, excepto que será ... Gracias por vivir la invitación de Mateo 25 y por ayudar a la iglesia a entusiasmarse con eso. Nos ayudaron a encontrar juntos un 'por qué' ... Les mantendremos en oración así como sabemos que están orando por nosotros."