Flor N. Vélez Díaz, presbiteriana de toda la vida procedente de Mayagüez, ha sido nombrada gerente del proceso judicial en la Oficina de la Asamblea General (OGA). Ella comienza su nueva labor el 29 de enero.
Vélez Díaz tiene un bachiller en microbiología industrial (2003) y una licenciatura en derecho de la Universidad Interamericana en Hato Rey, Puerto Rico (2006). Ella, desde su admision en el Colegio de Abogados en el 2006, trabajó tanto en la práctica privada, como en el Senado de Puerto Rico y en el Departamento de Justicia.
Actualmente se desempeña como abogada en el Departamento de Justicia de Puerto Rico como Abogada I, Agravios y División de Litigios por Mala Práctica Médica, trabajando en litigios por agravios, encarcelamientos, leyes de salud y negligencia médica. Vélez Díaz conoce muy bien el derecho civil y común, así como la mediación y la resolución alternativa de conflictos.
Vélez Díaz proviene de una familia presbiteriana multigeneracional y está casada con el ministro de la IP (EE. UU.) reverendo Edwin González Castillo. Como anciana gobernante, ha servido como comisionada del Sínodo de Puerto Rico en la Comisión Judicial Permanente de la Asamblea General (GAPJC) desde el 2012, incluso como vice moderadora (2015-2017) y como moderadora desde octubre del 2017. También ha servido en el comité de ministerio y varias comisiones administrativas del Presbiterio de San Juan.
«Estoy emocionada de trabajar con Flor, ya que combina y trae una perspectiva presbiteriana multigeneracional con experiencia en estructuras presbiterianas congregacionales, del concilio medio y a nivel nacional», dijo Laurie Griffith, secretaria asistente permanente de OGA y directora asociada de interpretación constitucional. «Flor también aporta al puesto de gerente de proceso judicial y de testimonio social una profunda experiencia legal».
La participación de Vélez Díaz en la Iglesia Presbiteriana (EE. UU.) comenzó a una edad temprana, acompañando a sus padres y luego a su abuelo a las iglesias donde sirvió como pastor laico comisionado. Ella siempre ha sido parte de los arreglos musicales en la adoración.
«Estoy encantada de tener la oportunidad de servir a la iglesia en este nuevo puesto y de colaborar con un grupo de personas tan maravillosas», dijo Vélez Díaz, «en la promoción de la paz, la unidad y la pureza de la iglesia».