El Reverendo J. Herbert Nelson, II, Secretario Permanente de la Asamblea General de la Iglesia Presbiteriana (EE.UU.), se unió a otros líderes religiosos el jueves para firmar un informe amicus curiae presentado ante el Tribunal Distrital de los Estados Unidos en contra de la orden ejecutiva del presidente.
La coalición interreligiosa de congregaciones, asociaciones y organizaciones religiosas «unieron sus voces para declararse en contra de la orden ejecutiva emitida el 27 de enero del 2017, la cual suspende el Programa de Admisión de Refugiados a los Estados Unidos y detiene la entrada a los ciudadanos de siete naciones mayoritariamente musulmanas a los Estados Unidos», señaló el informe. Este fue presentado ante el Tribunal Distrital de los Estados Unidos, Distrito Este de Nueva York.
«Mi participación en este informe refleja el compromiso histórico de la Iglesia Presbiteriana (EE.UU.), con dar la bienvenida a las personas refugiadas y exigir un sistema de inmigración libre de discriminación», dijo Nelson. «Continuamos protegiendo a las viudas, a los huérfanos y a las personas extranjeras».
El informe amicus respalda el caso presentado por Hameed Khalid Darweesh, Haider Sameer Abdulkhaleq Alshawi y otras personas tratadas de manera similar después de haber sido detenidos en el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy en Nueva York inmediatamente después de la orden ejecutiva del Presidente Donald Trump emitida para, supuestamente, «proteger al pueblo estadounidense de los ataques terroristas de extranjeros admitidos en los Estados Unidos».
La orden ejecutiva y la posterior detención de refugiados y otras personas legalmente investigadas para ingresar a los Estados Unidos provocaron protestas en aeropuertos y ciudades en todo el país. La acción colectiva interpuesta por Darweesh y Alshawi es acompañada por otros casos similares que se encuentran en diferentes niveles a través del sistema judicial.
El informe amicus interreligioso exhorta al tribunal a encontrar la orden ejecutiva ilegal, «reconociendo el profundo daño que causa en la misión, los valores y la libertad religiosa que nosotros, como representantes de una amplia gama de tradiciones de la fe, que tanto apreciamos».
La Iglesia Presbiteriana (EE. UU.), a través de su Asamblea General, ha aprobado más de veinte políticas de apoyo a las personas refugiadas y a su reasentamiento desde 1947. Entre esas políticas, existe una acción del 2016 para responder al mandato bíblico de cuidar del extranjero y el forastero a través de la defensa y la búsqueda de la mejoría en los asuntos relacionados con las políticas de reasentamiento del gobierno de los Estados Unidos.
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